Qué tal, Locos del Baloncesto Colegial!
En nuestro particular 'March Madness' de Copa Colegial, nos acercamos a los partidos finales. (Aquí jamás podremos usar la palabra 'decisivos' porque desde que empieza el torneo hasta que acaba todos los partidos lo son).
Esta vez fui enviado especial a la mítica cancha de Joyfe Canguros, para vivir la apasionante semifinal masculina entre Joyfe y San Agustín. La cancha Marsupial registró por supuesto un nuevo lleno, y siguen acercándose poco a poco al registro del viejo Chicago Stadium, la casa de Michael Jordan, que estuvo más de 10 temporadas agotando las localidades de cada encuentro. Nosotros, sin embargo, lo asociamos más tal vez a uno de los recintos clave del baloncesto colegial en Estados Unidos: el gimnasio de la Universidad de Pennsylvania, conocido como The Palestra.
Allí nos recibió como siempre Antonio Liébana. Si la cancha de Joyfe es un clásico, Antonio es para nosotros mucho más que un Canguro. Con él contactamos en el inicio del torneo, y en Joyfe seguirá, ya lo veréis, cuando cumplamos los 50 años del evento.
Con Antonio las explicaciones filosóficas de lo que queríamos hacer no fueron necesarias: lo entendió todo desde el principio.
“¿Queréis ambiente? ¿Queréis sentimiento colegial? ¿Queréis ilusión, ganas, apoyo? Pues estáis en el sitio correcto.
Qué es necesario presentar a los jugadores antes de los partidos… pues en Joyfe apagan los focos y utilizan un cañón de luz, o salen uno por uno desde la boca del vestuario. Que se necesita una mascota… allí está un futuro showman vestido con un disfraz de Canguro con pelo suficiente para pasear por Siberia y sudar. Que son buenas las pancartas… pues ambos fondos se empapelan cada viernes.
Los primeros años, sin embargo, Joyfe se quedaba siempre a las puertas. Uno de aquellos días, con la derrota todavía caliente tras una impresionante semifinal perdida, se presentó en la Gran Final, y mientras charlábamos, me dijo: Pablo, yo también quiero tener uno de esos (se refería, por supuesto, al ESTANDARTE de campeones). Poco tiempo después, las chicas le dieron una alegría, y este año podría ser el turno de los chicos.
A veces, Antonio, los sueños acaban cumpliéndose.
Te esperamos en la Final… pero recuerda que tienes al menos otros 50 años por delante de torneo. Después, dejaremos que te jubiles en paz.
sábado, 14 de marzo de 2009
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